Hemos decidido darle un hermanito a nuestro gato y no sabemos cómo reaccionará. La adaptación entre mininos puede ser dura y estresante tanto para humanos como para gatos. Podemos evitar peleas y bufidos si seguimos unas pautas básicas de presentación.
1. Sexo: es secundario, ya que lo más relevante es el carácter de cada gato. Si ambos son dominantes, la adaptación será más complicada. Si los dos gatos son machos adultos y no están castrados, al principio será más difícil; si son dos hembras adultas sin esterilizar también pueden tener problemas de adaptación. Hay que recalcar que depende del carácter de cada gato, pero lo mejor es tener a los gatos esterilizados.
2. Edad: si tenemos un gato anciano tranquilo, un compañero pequeño lleno de energía puede generarle estrés. Procuraremos que sean gatos de edades similares para que sean amigos y compañeros de juegos.
3. Atenciones: cuando llevamos a casa un gato nuevo, por norma general, el residente debe tener más atenciones por parte de todos los miembros de la familia. Si ve que dedicamos más tiempo al nuevo gatito puede rechazarlo e incluso deprimirse. Cuando se vayan aceptando podremos crear juegos en los que ambos gatos colaboren. Premiaremos a los dos por igual y mimaremos más al gato de la casa para que no se sienta desplazado.
4. Comida: lo apropiado es que cada gato tenga sus propios recipientes para la comida y el agua. así evitaremos trifulcas a la hora de comer.
5. Areneros. Lo más sensato es que cada gato tenga una bandeja de arena. Luego puede que no sea necesaria, pero al principio es mejor que cada uno tenga la suya.
6. Feliway: el Feliway es un producto que reproduce ciertas propiedades de las hormonas faciales del gato y produce bienestar y tranquilidad en el gato.
Pautas:
1. Cuando llegues a casa con el nuevo inquilino no los presentes NUNCA de golpe o será el principio de una mala relación que costará mucho más de consolidarse, esto podría provocar bufidos, arañazos y algún que otro disgusto.
2. Cuando llegue el gatito nuevo (debe estar dentro de un transportín) deja que se huelan durante unos minutos a través del mismo. Deja que el primer gato sea el que se acerque a oler al nuevo.
3. Tras esta primera presentación, déjalos en habitaciones separadas de la casa, de modo que puedan olerse por debajo de la puerta, pero sin poder verse ni atacarse. Esto puede durar de 1 a 2 semanas, depende del carácter de los gatos.
4. Deberás prestarle toda la atención posible a tu primer gato, así se sentirá seguro y no tendrá que competir por tu afecto.
5. Instala a tu nuevo gato en un recinto seguro donde pueda olfatear y relajarse para que vaya conociendo poco a poco la casa. Debe recorrer la casa sin la presencia del otro gato hasta que se complete el proceso de presentación. El recinto debe ser una habitación que no suela visitar tu primer gato. Pon una camita, comida, agua, una bandeja sanitaria y un rascador. Al principio, tu primer gato bufará y rugirá al nuevo desde el otro lado de la puerta. Ignóralo y aléjate. Nunca lo castigues por hacer sonidos agresivos, solo serviría para crear tensión entre los dos gatos.